Casi todas las mujeres que hemos sido madres, creo que estamos de acuerdo en algo: tu vida da un giro de 180 grados. Y no solo a nivel emocional, sino en el ámbito laboral, social, familiar...Muchos cambios que asimilar y poco tiempo para ello.

Mucha gente que sabe que trabajo para Thermomix® me pregunta  que qué tiene esta empresa que nos engancha tanto.

Bueno, en mi caso, yo entré en Thermomix® casi por casualidad.Tenía un negocio propio y una niña de 4 años...y yo ya veía que iba a tener que reencauzar mi futuro profesional.

Me enseñaron la máquina y me encantó... ¡Le vi tantas posibilidades! Siempre me ha gustado la cocina, pero después de trabajar más de 10 horas, llegas a casa y no tienes muchas ganas de nada. Eso fue lo que más me gustó de Thermomix® .

Yo quería la máquina, pero no me la podía permitir por aquel entonces...y me propusieron ganármela...yo era muy escéptica...¿Cuándo iba a tener tiempo? ¡Pero si apenas  llegaba a  todo!

Es verdad que no te la regalan por nada...no es gratis...pero bueno, la vida me ha enseñado que todo lo que merece la pena no lo es...

Me formaron, me acompañaron...en mi Delegación ( y hasta ahora toda la gente del mundo Thermomix® que he podido conocer) todas han sido una gran ayuda y un gran apoyo...muchas de ellas han pasado por lo mismo que yo...así que me sentí comprendida.

Mi sorpresa fue, que me gané la Thermomix® ...y ahí pensaba que terminaba mi relación laboral con la empresa. Sin embargo, resultó que la vida a veces te da un sopapo en la cara y te espabila... en mi caso ese tortazo fue mi segundo embarazo...ni planeado no buscado.

Tanto mi marido como yo tuvimos claro que tenía que cerrar mi negocio porque no lo podia compatibilizar con todo...tampoco me compensaba, muchas horas, mucho esfuerzo y apenas beneficio económico.

Y decidí darle una oportunidad profesional a Thermomix® . Y no me arrepiento , es de las mejores decisiones que he tomado en mi vida.

Creo que este segundo embarazo me sirvió para asentar prioridades... Para mi, mi carrera profesional siempre había sido una parte vital de mi vida, pero había sufrido muchos desengaños...porque eso de la conciliación no existe, es una moto que nos han querido vender.

Nada, absolutamente nada, compensa (al menos para mi) el hecho de tener una carrera profesional y haberte perdido casi por completo los primeros 4 años de vida de tu niña...No quería cometer ese error con mi segunda hija, decidí que ellas eran mi prioridad.

Hoy, Carla tiene un año y casi va a hacer dos que estoy en la empresa.

Todos los principios son duros, este trabajo no es fácil , tienes que ser organizada, constante, disciplinada...y te tiene que gustar el trato con el cliente. Pero compensa, con creces.

Tengo un trabajo que me gusta, empiezo a disfrutar de una buena cartera de clientes ( cartera que hay que ganarse, cuidar y alimentar) y puedo criar a mis hijas.

Hoy empiezo de nuevo este Blog, una oportunidad que me da Thermomix® de compartir con el mundo todo aquello que me va pasando, en esta nueva etapa.

No siempre pondré recetas, ni hablaré exclusivamente de cocina...pero quiero aportar mi  granito de arena y esperar que mi experiencia laboral y familiar sirva de ayuda y (ojalá) de inspiración.

Y como mi madre siempre me ha dicho que es de bien nacido ser agradecido, quiero empezar dando las gracias a tres grandes mujeres que para mi han sido esenciales en este nuevo camino...porque ellas me inspiraron, con ellas sigo aprendiendo y en ellas me veo reflejada. Gracias Nelly Muñoz (la persona que me reclutó y que hoy es mi jefa de grupo), MªLuz Pardos ( Jefa de Ventas de la Delegación Valencia 1 de Maestro Rodrigo) y Mar Ramis (Jefa de área).

Este nuevo comienzo va por vosotras, así que vamos allá.